El martes 15 de agosto del 2023, durante un recorrido de monitoreo del humedal sitio Ramsar 2047, entre el puente del ferrocarril y los Puentes Cuates, observamos a una Corúa Neotropical (Nannopterum brasilianum) que mostraba dificultades para nadar; era evidente que el ave forcejeaba tratando de liberarse de algo que le impedía volar, nadar o sumergirse.
Al acercarnos nos percatamos de que estaba atrapada en una red de pesca. En la cual también se encontraban atrapados peces y cangrejos.
Con no pocas dificultades y sí mucho cuidado, para evitar ataques con el pico, retiramos la red de sus alas y patas. Afortunadamente el ave parecía no tener daños graves y se alejó buceando hasta perderse de vista entre los tules. Posteriormente desenredamos a los peces, se alejaron nadando de manera lenta, y en uno de ellos (que probablemente llevaba más tiempo atrapado en la red) se veían sus escamas y aletas maltratadas. Finalmente liberamos a los langostinos vivos y retiramos la red del cauce del agua.
¿Cuánto tiempo más hubieran podido sobrevivir esos animales sin ayuda? ¿Cuántas situaciones como esta ocurren sin que nadie se percate (con la muerte de los animales como consecuencia)?
En repetidas ocasiones hemos denunciado y mostrado el riesgo y daño que ocasiona el hilo de pesca a la fauna. La evidencia fotográfica muestra como las aves (garzas, gallaretas, playeros, zanates, gaviotas, etc.), a consecuencia de enredarse en el hilo de pesca: se amputan miembros, se lastiman las alas, o mueren.
La pesca en las aguas del humedal es un potencial problema de salud y ambiental por diversas razones. En el río se vierten aguas negras en distintos puntos, por lo que es de suponerse que los peces que lo habitan no son aptos para su consumo. Sin embargo, diariamente se observa a pescadores retirarse con cubetas llenas con peces, para consumo personal (no para vender, según sus palabras). En las pescaderías generalmente dicen que el pescado proviene de la presa Francisco I. Madero, en Rosales, Chihuahua.
En cuanto al problema ambiental, como demuestran las imágenes, se perjudica a la biodiversidad a causa de la irresponsabilidad de algunos pescadores (y la nula regulación que hay por parte de las autoridades de dicha práctica) quienes dejan hilo de pesca o redes abandonados. También existe la costumbre de dejar los anzuelos y redes montados toda la noche o más de un día para luego regresar y recoger la pesca.
Esto es una muestra más de que el humedal sólo sirve como moneda de cambio a las autoridades, que sacan desplegados mediáticos para decir que “lo cuidan y protegen”, que “aman a las aves”, se dicen “activados” en la protección del ecosistema, la realidad no miente, la problemática ambiental es numerosa. El río cada día está peor.
Texto y fotografía por Vida en el río San Pedro. 15 de agosto de 2023
No se autoriza la reproducción del texto sin previa solicitud por parte del interesado y autorización por parte de nuestra organización. Todas las imágenes presentadas fueron tomadas por colaboradores de este sitio, a menos que se indique lo contrario. En el caso de utilizar texto y/o imágenes de nuestros colaboradores se deberá usar una referencia adecuada y citar a la fuente original cuando la información de este texto haya sido extraída de una fuente externa.
Vida en el Río San Pedro 
Deja un comentario